Sistemas de Tratamiento en Zonas Inundables o con Alto Nivel Freático: Desafíos y Soluciones 

©Tanque Diez - Publicación Web - Fecha: 20/05/2023 


La construcción de sistemas de tratamiento en zonas inundables o con alto nivel freático plantea desafíos únicos para los profesionales en el ámbito de la construcción, quienes deben enfrentar condiciones geotécnicas e hidrológicas complejas. Estas zonas con características tan especificas representan un riesgo inherente para el funcionamiento eficiente de los sistemas de tratamiento, ya que pueden verse afectados por la entrada de agua, la variación del nivel freático y la presencia de suelos saturados.
En esta publicación analizaremos brevemente los desafíos asociados con la construcción de sistemas de tratamiento en estas áreas con altos índices de factor de riesgo, así como las soluciones técnicas empleadas para garantizar su eficacia y durabilidad.

Análisis de las Condiciones del Sitio

Antes de diseñar y construir un sistema de tratamiento en una zona inundable o con alto nivel freático, es fundamental realizar un estudio detallado de las condiciones del sitio. Esto implica evaluar la hidrología del área, la variabilidad estacional de los niveles de agua y las características geotécnicas del suelo, así como la vulnerabilidad hídrica de cada lugar en específico.
La hidrología del área debe ser estudiada minuciosamente para determinar el comportamiento del agua en las superficies y así comprender por medio de estimaciones cómo afectan las precipitaciones, la escorrentía y el perfil topográfico del lugar que se tiene contemplado para colocar el eventual sistema de tratamiento.
Realizar estos estudios proporcionan información esencial para determinar la ubicación y la elevación adecuada del sistema de tratamiento. Además, se debe incluir dentro de los estudios de suelos, el ensayo de percolación, ya que este permite obtener la tasa de infiltración para determinar la aceptabilidad del suelo para infiltración, así como detectar si hay presencia aguas subterránea y la profundidad de estas, valores que influyen significativamente en la selección de las tecnologías de tratamiento más apropiadas.
El análisis geotécnico es otro aspecto crucial, ya que los suelos en zonas inundables o con alto nivel freático suelen ser altamente saturados y poseen baja capacidad de soporte. Identificar la composición del suelo, su permeabilidad y su capacidad de carga ayudará a determinar las técnicas de cimentación y excavación adecuadas.

Diseño del Sistema de Tratamiento

El diseño de un sistema de tratamiento en una zona inundable o con alto nivel freático requiere consideraciones específicas para garantizar su rendimiento óptimo y su resistencia a las condiciones adversas.

Ubicación y elevación: La ubicación del sistema de tratamiento debe ser seleccionada cuidadosamente para minimizar los riesgos de inundación y garantizar un acceso adecuado para la operación y el mantenimiento. La elevación del sistema debe ser establecida por encima de los niveles de inundación esperados y teniendo en cuenta las variaciones estacionales del nivel freático.

Selección de tecnologías de tratamiento: Algunas opciones comunes incluyen sistemas anaerobios de alta eficiencia con sistemas de filtración, sistemas de fitodepuración o humedales artificiales, sistemas de lodos activados, lagunas de oxidación. La disposición final de las aguas tratadas comúnmente se hace por medio de sistemas de riego subsuperficial. Estas tecnologías deben adaptarse a las características hidrológicas y geotécnicas del sitio, y ser capaces de operar en condiciones de alta humedad y fluctuaciones del nivel freático.

Sistemas Tanque Diez aptos para este tipo de uso: Para zonas inundables o con alto nivel freático, la recomendación es utilizar sistemas de Bio-Plantas Residenciales TD o Plantas de Tratamiento TD, la salida se enviará a un sistema de riego subsuperficial en zonas verdes. La escogencia de uno u otro sistema se deberá hacer según el caudal diario a tratar y la magnitud del proyecto.

Diseño estructural: Los sistemas de tratamiento deben ser diseñados con estructuras resistentes al agua y con capacidad de soporte adecuada. Esto implica el uso de materiales duraderos como el concreto y técnicas de construcción que aseguren la integridad del sistema frente a las presiones hidrostáticas y las cargas del suelo saturado. Además, se pueden emplear sistemas de drenaje para controlar el exceso de agua y evitar daños en las estructuras.

Impermeabilización: La impermeabilización es un aspecto esencial en la construcción de sistemas de tratamiento en estas zonas. Se utilizan membranas impermeables, revestimientos de concreto o geotextiles para evitar la filtración de agua hacia el suelo circundante o hacia el sistema de tratamiento. Esto ayuda a mantener la eficiencia del proceso de tratamiento y a prevenir la contaminación del agua subterránea.

Sistemas de drenaje: Se deben diseñar sistemas de drenaje efectivos que permitan la recolección y evacuación controlada del agua pluvial y del agua residual tratada. Esto puede implicar la instalación de canales de drenaje, tuberías de desagüe y bombas de elevación para controlar los niveles de agua y evitar inundaciones.

Monitoreo y mantenimiento: Los sistemas de tratamiento requieren un monitoreo y mantenimiento periódicos para garantizar su funcionamiento óptimo y prevenir posibles fallas. Se deben establecer programas de inspección para controlar los niveles de agua, la calidad del efluente tratado y el estado de las estructuras. Asimismo, es importante llevar a cabo tareas de mantenimiento regular, como limpieza de equipos, revisión de estructuras y reparación de posibles daños causados por la exposición al agua.

Conclusiones

El adecuado manejo de aguas residuales representa un desafío significativo para los ingenieros. Sin embargo, con un análisis detallado de las condiciones del sitio y la aplicación de técnicas y materiales adecuados, es posible diseñar y construir sistemas de tratamiento eficientes y duraderos en estas áreas.
La selección cuidadosa de tecnologías de tratamiento, el diseño estructural resistente al agua, la impermeabilización efectiva y la disposición adecuada del agua son elementos clave para el éxito de estos proyectos. Además, el monitoreo constante y el mantenimiento regular son fundamentales para garantizar la funcionalidad a largo plazo de los sistemas de tratamiento en estas zonas desafiantes.


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